INGREDIENTES:
6 bollitos de pan de leche
250 ml de leche
125 ml de nata de cocinar
75 gr de azúcar
2 huevos grandes
La piel de un limón
1 rama de canela
Aceite de oliva para freír
Azúcar y canela para rebozar
Miel o helado par acompañar
ELABORACIÓN:
Lo primero es preparar todos los ingredientes antes de empezar a cocinar.
En un cazo, vamos a poner la leche, la nata, el azúcar, la piel de limón sin la parte blanca y la rama de canela a calentar a fuego medio hasta que empiece a hervir.
Una vez haya hervido, retiramos el cazo del fuego y dejamos templar la leche. A continuación, la vertemos con ayuda de un colador en una fuente.
Cogemos los bollitos y con ayuda de un palillo o brocheta de madera vamos pinchándolos para que se empapen bien de leche.
Metemos en la leche los bollitos. Los dejaremos ahí durante 15 minutos dándoles la vuelta de vez en cuando.
Pasado el tiempo de remojo, ponemos una sartén mediana al fuego con abundante aceite de girasol y en un plato batimos bien los huevos. Cuando el aceite esté caliente, pasamos los bollitos por el huevo con cuidado de que no se rompan.
A continuación, los vamos friendo como mucho de tres en tres hasta que estén dorados y los pasamos a un plato con papel absorbente para que suelten el exceso de grasa. Yo después las rebocé con azúcar y canela.
También podéis dejar que se enfríen las torrijas y las presentamos bien en una bandeja todas juntas o bien en una ración individual acompañadas de miel, con una bola de helado de vainilla o chocolate.
Como truco, cuando las torrijas ya están bien frías, podemos inyectar un poco más de leche en el interior con ayuda de una jeringuilla para salsas. Así os van a quedar aún más jugosas si cabe. Yo no lo hice y quedaron súper jugosas.
Fuente: canal cocina.
Comentarios
Publicar un comentario