INGREDIENTES:
5 huevos
250 gr ó 3 vasos de yogur de harina de trigo
250 gr ó 3 vasos de yogur de azúcar
60 ml ó 1/2 vaso de yogur de aceite de oliva suave o girasol
200 ml de nata de montar (crema de leche)
Ralladura de 2 limones
1 sobre de levadura
Unas gotas de esencia de limón
1 pellizco de sal
Mantequilla o espray desmoldeador
ELABORACIÓN:
Lo primero es separar las claras de huevo de las yemas y las pones en distintos recipientes.
Añade a las claras la mitad del azúcar, el pellizco de sal y las montas a punto de nieve. Si ves que no te suben puedes echar un poco de azúcar glas, ayuda.
En otro bol pones la nata líquida, el resto del azúcar y móntala. En cuanto veas que esta bien hecha paras, porque si no corres el riesgo de pasarte y se puede cortar o convertirse en mantequilla.
En el recipiente en donde tienes las yemas, echas la nata ya montada, el aceite y remueves todo con movimientos envolventes con cuidado de que no se baje.
Cuando la mezcla esté uniforme, incorporas la harina mezclada con la levadura, la tamizas y lo vuelves a remover con cuidado. Echa la ralladura de limón, las gotitas de esencia de vainilla y a mover otra vez.
Por último, tienes que agregar las claras montadas poco a poco hasta obtener una mezcla homogénea.
Precalienta el horno a 180ºC con calor arriba y abajo.
Mientras se va calentando, vas forrando el fondo del molde con papel vegetal, corta los bordes, engrasa los lados con mantequilla o con el espray y viertes la mezcla. Espolvoreé con azúcar por arriba. Yo he usado un molde de 23 cm.
Hornea unos 40 minutos. Cuando veas que ha subido, bajas la temperatura a 160ºC. Pasado ese tiempo debes de comprobar que se ha cuajado el bizcocho pinchando con un palillo, tiene que salir limpio. Una vez frío lo puedes desmoldar y decorarlo como más te guste.
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