INGREDIENTES:
400g de harina de repostería tamizada
200g de almendra molida.
100g de azúcar
4 cucharadas de anís dulce.
150ml de vino dulce
Media cucharada de canela
1/4 de cucharadita de clavo molido
2 cucharaditas de matalauva, anís en grano
2 cucharaditas de sésamo tostado
Pizca de sal
1 sobre de levadura
150 ml de aceite de oliva suave
Una cáscara de limón
Azúcar glas para rebozar.
ELABORACIÓN:
En primer lugar freímos la cáscara del limón con el aceite. Retiramos la cáscara y dejamos enfriar el aceite.
Una vez frío hacemos la masa. Podéis hacerla en la amasadora, a mano. Yo lo hice a mano
En un bol grande ponemos la harina y la levadura previamente tamizada. Añadimos la almendra molida, el azúcar, canela, clavo, la matalauva,el sésamo y la pizca de sal. Mezclamos muy bien hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
Después Añadimos los ingredientes líquidos, el anís, el vino dulce y el aceite que teníamos reservado. Andamos muy bien hasta que obtengamos una masa uniforme. La taparemos bien y dejaremos reposar una hora.
Estiramos bien la masa con la ayuda de dos láminas de papel de horno, una en la base y otra encima y con la ayuda de un rodillo vamos estirando la masa, la dejaremos con un centímetro de grosor.
Ahora con un molde, o un vaso damos forma a los roscos. Con el tapón de una botella de agua hice el agujero interior del rosco.
Ponemos a precalentar el horno a 180°, calor arriba y abajo.
Vamos colocando los roscos en la bandeja del horno forrada con papel de horno, dejando un poco de espacio entre ellos.
Una vez los tengamos, horneamos de 15 a 20 min. Cuando empiezan a tomar color por abajo ya están listos. Ir vigilando que cada horno es diferente.
Dejamos enfriar en una rejilla y los rebozamos por azúcar glas.
Yo los envolví con papel de seda y los tengo guardados en una caja metálica. Están riquísimos!!
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